visita mi web creativa

sábado, 15 de mayo de 2010

La materia

lsksjd


Somos seres jjdhd de vinilo.



ksjdjjshdhdhdcj Maquetas en el desván
fjfjfjfjfjfjfjfjfj
hahahahhhshshshshsshshshs atentas que...
lekejrjrjrjththrejejejrrhrnrmfn nos transformamos.




Música de surco
en paredes retro.

Flores de vinilo
sobre sofás
hahahhshshdhdhdhdh d tranquilos.

hshshdhdhdgdhdfhfhfhfhdhdh La misma lluvia,
kdjdjfjfhfhdfjdjdkskskskakaka ¿la misma música?
jdh



22 comentarios:

Emilio Porta dijo...

Días de lluvia y frío que congelan el marco...¿Mayo florido dice el refrán? Este año flores de invernadero...El tuyo siempre es sorprendente. Te llevas muy bien con lo vegetal...pero, por extensión grafíca, je, je, también, según parece, con los "nunmulites" esos foraminíferos extintos que dejan sus huellas fósiles en la vida para no desaparecer del todo. Al menos, dejar "el grabado en la piedra" o el papel o la pantalla(así abrocho varias cosas a la vez de tí y nuestros/as amigas). En fin, que el frío no te esconda la voz, siempre tan original, no sólo en directo, sino también escribiendo y conserve tus magníficas pinceladas, no sólo adorno, sino siempre reflexión.

Nelken Rot dijo...

Gracias por tus palabras y afecto Port. Cruzo los dedos para que el calor vuelva y se quede, templado no más.

En cuanto a la reflexión: ¿te has dado cuenta de que ya han perdido el sitio las cintas de cassette, el vhs, el cd? El ipod, el realplayer se han comido los lugares.

Tendremos que ser como los vinilos y cambiar nuestro uso para seguir siendo arte necesario.

Los grupos musicales ya no tienen maquetas sino un myspace. La evolución de la especie urbana.

Nel

Anónimo dijo...

Veo, sí, como se agarra la nostalgia a las paredes de nuestras propias emociones sin reparar en que la vida es movimiento y sólo el recuerdo es constante y variable a la vez. Pero caminamos sobre un planeta distinto y todo es diferente, desde los pasos a la senda en que los damos. La memoria nos empuja, pero la luz sigue recorriendo el espacio y en ese espacio hay que dibujar y comunicarnos de otra forma. La especie es muy superior al individuo, aunque para el creador esto no sea un consuelo. Por eso tenemos que decorar nuestro interior, diseñar nuestro territorio, personal y de grupo, y saber que "nunca el retrato es superior a lo retratado". Si el arte imita a la vida...el arte debe saber con que vida se encuentra enfrente.

Port

Nelken Rot dijo...

A great comment

Mari Carmen Azkona dijo...

“El tiempo no es sino el espacio entre nuestros recuerdos”
Henri Frédéric Amiel

Nelken, los recuerdos son souvenires que vamos recogiendo en el viaje de la vida. Se mezclan con los acasos y, a veces, ralentizan nuestros pasos.

Es bueno mirar atrás. Recrearnos en primaveras pasadas, admirar flores de vinilo...y llegar al Mayo del presente. Y darnos cuenta de que hemos cambiado, de que tenemos una capacidad asombrosa de adaptación... y de que bajo la misma lluvia, además de la música de entonces, tenemos la música del presente.

Bihotzez.

Jesús Arroyo dijo...

Hola VOZ:

¡Resistamos! o ¡reciclémonos!
Uy, no sé, los avances me confunden... Con lo bien que estaba yo escuchando a "los pegamoides" o a "Supertramp" en LP, que el otro día se me ocurrió decir esto de LP y los amigos de mi hija se descojonaban, como si hubieran pasado 50 años... Se le queda a uno una cara de toli...

Besitos.

Anónimo dijo...

Esto de las letras...no se...desconcierta un poco...Es un cambio algo chirriante...Pero quizás es que es tarde y no oigo bien...

Port

Anónimo dijo...

¿La rebelión de los "nunmulites" olvidados, quizás?

Port

Emilio Porta dijo...

Es muy bueno...he descubierto algo más...todos empezamos a hablar con sonidos así...

Port

Anónimo dijo...

Y es que pienso, luego existo, aunque a veces piense tarde.

Port

Anónimo dijo...

"Uno a uno los pensamientos son una cadena de locos diminutos"

Esto es de un libro de Emilio Porta, Anamarel, publicado hace varios años. Al ver esta cadena de comentarios cortos...se me ha ocurrido recordar este poema.

David Nihalat

Anónimo dijo...

Perdón por aumentar de forma tan seguida e impulsiva el número de tus comentarios. Como normalmente escribo "coments" largos...cuando lo que me gusta en realidad son las distancias cortas no sábía como romper el eaquema y el resultado es el que es...Francisco López Martinez ha escrito en su blog acerca de "la prisa"...deberiamos pensar sobre esto. Vivimos en una constante urgencia. Algunos días, trato de engañar a la realidad y me escapo. Algo funciona mal cuando tenemos que escapar del marco para que el cuadro se vea.

Port

Toñi dijo...

Evolución, reciclaje, transformación...”La misma lluvia, ¿la misma música?”
Las nuevas tecnologías avanzan a una velocidad vertiginosa, y sin darnos cuenta avanzamos de igual modo... Pero aun así me resisto a abandonar los vinilos. De hecho hace un par de años me compré un tocadiscos para seguir escuchando esa música escrita con la tinta de los recuerdos.

Besos

Pilar dijo...

Me he trasladado con este poema a un desván de los 70, en una tarde lluviosa en la que al final sale el sol, tras una larga tarde rebuscando en los baúles del pasado.
Fíjate qué de cosas he hecho en estos 5 minutos!! qué viaje estupendo!! le falta algo de música!
Un beso

Rosa dijo...

¿Vinilo?
Me pasa como a Pilar, pero me voy mas lejos… A esa imagen idílica del vinilo unido a los "guateques" -que mayor soy-, primera fiesta adolescente, primer amor casi prohibido y al fondo siempre una canción que marcaba el momento para siempre…

Que dulce paseo de tu mano, siempre llena de ternura, Nelken.

Un beso

Nelken Rot dijo...

Mamma mía!! qué gusto da ver estas tierras tan floridas en comentarios. Está claro que todos hemos pasado por el vinilo en los buenos y en los malos tiempos. La música es esa gran compañera que nos sigue en nuestros diferentes moods, no hay duda.

Todos hacéis unas lecturas muy interesantes, con grandes aportaciones. Pilar, tienes toda la razón, de hecho, me he dado cuenta que llevo demasiadas entradas sin incluir la música. Espero que os guste mi selección que refleja lo que hablamos: todo se transforma, aunque es muy bello mantener esencias, las grandes y míticas esencias.

Me paso a otro post.

Besos

NEL

Nelken Rot dijo...

¿Resistir o reciclar? Tal vez querido Jesús, queridas Mari Carmen y Toñi, Pilar y Rosa, tal vez, decía mi profesor de cambio social en la facultad, existen los huevos-gallina.

Personalmente, admito que los recuerdos tengan un espacio en nuestro corazón, tampoco demasiado amplio, eeh!! qué tenemos mucho presente. Lo que creo que es poco práctico mantener los vinilos. Toñi te ofrezco mi colección de vinilos de los años 50 y 80, seguro que los podrías cuidar como merecen en un espacio calladito y de vez en cuando, dejar que brillen con todo su esplendor en tú tocadiscos de guateque y comfort.

Cuando vengas a Madrid, chulapa mía, ya sabes que te espera la música.

Confío en que el vinilo todavía tenga muchas más cosas que decir. ¿quién sabe si dentro de 10 años las flores de vinilo al tocarlas nos ofrecen música?

La transformación continúa, gracias a todos por dar testimonio de ella, desde los fantásticos nunmulites hasta los formatos que estén por vivir.

muakales repartidos, my friends.

Nelken

Alejandro Pérez García dijo...

Querida Nelken, llego tarde pero a tiempo para recordar. En mis tiempos de locura la música la haciamos los jóvenes, rondando a las mozas en edad de merecer. Lo primero que bailé fue la sintonia de un noticiario a las diez de la noche, a la luz de la luna, en un estanque que solo tuvo agua el día de la inauguración. Era agosto, había luna. Del transistor que trajeron de Francia los hijos de unos emigrantes salió el anuncio de la "danza", el de siempre (en los pueblos no había otra cosa): "Aquí Radio Gredos, emisora sindical de las dos Castillas, conectamos con radio Nacional de España..." Tututú, tutututututuuututú... Sólo bailamos. Ni nos enteramos de los incendios de aquella jornada de verano. Se gastaron las pilas. No dejamos de bailar...

No digo más, que me váis a conocer y hasta me sacaréis la edad.

Claro, luego vinieron los venilos, las gramolas, y los tocatas, pero eso ya fue en Madrid, en los guateques que organizaban las niñas bien en los garajes de sus casas, cuando se quedaban para estudiar y los papis pasaban el domingo en la casita de la sierra. Eso sí, siempre dejaban a las nenas meriendas abundantes, muchas cocacolas y alguna botella de gin.

Pero, sea como sea, tienes razón Nelken, esos recuerdos tan cicateros y tan añosos, mentarlos lo justo. Me quedo con las flores de ahora y con el futuro que luego nos espera.

Gracias por revolver en el desván de los recuerdos. De los chismes de antaño, es lo único que me queda.

Besos

Manuel dijo...

Bueno, pues os advierto que yo, que soy un romántico de los aparatejo "tradicionales" (dejemoslo así), tengo todo un equipo de música de "los de antes" en mi despacho de casa, a la espera de ponerlo en marcha. O sea, un giradiscos, una doble pletina de esas con las que iniciamos el pirateo... Un amplificacdor de los de verdad.

Este fin de semana pasado realicé uno de mis sueños de los últimos años: desmonté en casa de Rosa todo un bosque de cables que trataba de sostener la estructura de un complejo sistema de audio/video. Lamentablemente solo pudimos salvar el VHS...

A mi me gustan mis vinilos girando en el plato y sonando con tierra en los surcos.

Besos.

Toñi dijo...

Je, je. Nelken, te tomo la palabra. Y hasta que llegue el momento, disfrutaré del guateque que has organizado: ambiente ameno, buena música y muy, muy grata compañía.

Besos.

Emilio Porta dijo...

La idea de que los vinilos son discos fósiles (nunmulites) es muy personal...me gustaba por la connotación redonda de los dibujos, esos surcos grabados-signos...Bueno, no siempre se acierta...O quizás, a veces, mis derivaciones son crípticas...Quise remontar también los sonidos al origen, en mi apreciación, aunque todo es mucho más sencillo, recuerdos de un tiempo más cercano...qué manía de buscarle tres pies al gato viendo cosas que no existen...Qué manía, por mi parte, de inventarme la vida incluso en las entradas de mis amigos...Esa deformación de lector-espectador-creador en la recepción que siempre me acompaña...
Con lo bueno que es este texto para acompañar y escuchar, simplemente, las canciones propias...Me pasó una vez que dí una charla obre Aura, de Carlos Fuentes, un maravilloso relato que es pura magia y que he leído y releído, desde mi adolescencia, varias veces y siempre le encuentro cosas nuevas. Recuerdo que, en esa charla, dije una serie de cosas sobre el relato que, probablemente, solo veía yo. El caso es que, al final, un amigo que asistió al acto me dijo...¿pero tú estás seguro de que has leído ese libro?. O al menos...¿has leído el mismo libro que yo?. En aquél momento la pregunta me desconcertó un poco y le dije que sí, que por supuesto. Hoy, sin embargo le habría dicho: “No, querido Carlos (ese era su nombre) ninguno leemos el mismo libro nunca. Todos leemos distintos libros aunque por fuera sean iguales”.

Jesús Arroyo dijo...

Y no sólo eso, Porta. Me refiero a los surcos.
¿Qué se hacía cuando ponías un vinilo en el plato y la música dormía a los osos en plena primavera?
Yo, sentado en la cama, me fijaba en el sube-baja del disco, esa pequeña oscilación mientras giraba que recordaba a las barcas del Retiro cuando dejabas de remar porque tu chica se ponía tontorrona o uno... toro de lídia (uy, que me marcho de comentario, será la primavera del oso) y, repentinamente, se abría la puerta y te decían (me decían) ¿qué te has fumado?
Hasta para eso eran válidos los vinilos.