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viernes, 15 de enero de 2010

Sí, tú y yo podemos

Tengo el gusto de dedicar este poemita a todos los escritores y escritoras en red, porque al igual que una pareja es mucho más que dos, si la cosa se da bien, escribir en red también puede ser mucho más, si se construye para que así sea, y sí, podemos. Yes, we can!! as Obama said.

Además, este poema está dedicado a Giusseppe Domínguez que siempre me mira las alas y con los ojos me dice: vuela, tú puedes llegar más lejos!! En esta ocasión me señaló la grandeza de Whitman.

Sí, tú y yo podemos

Sí, yo puedo.
Nosotros sí podemos.
PODEROSO el canto de un pájaro.
Sí, tú y yo podemos.

Hoy es el mañana que ayer soñamos.
Un paso, luego otro.
El Tango es cosa de dos. Sí, podemos.

La noche insomne con lunares y peineta
nos dice: !adelante!

La madrugada agarrada
hasta las trancas,
prendida del Alba,
nos invita:
Levanta
Camina
tú y yo, podemos.

Cantamos
Volemos, somos.
Pájaro de alas anchas con sombrero,
pico naranja y ráfaga de viento.
Volemos:
en la tarde
en el desayuno
salgamos de las oficinas
pisemos la nieve,
lancemos las bolas al jefe.

Unas gotitas de sangre se derraman
sobre el ébano de la ventana,
la hilandera despierta.

Sí, tú y yo podemos.
Poderosa, la voz. Un pueblo. Podemos.


Variación III. No te detengas. Walt Whitman.

En contestación al comentario de Valeriano sobre la emoción de la vida, y la dureza que ésta, a veces conlleva (Haití), quiero compartir el video de María Bethania, donde se canta a la vida y a la belleza de ser el eterno aprendiz. Finalmente, cuando solo nos queda como motivo de alegría el hecho de estar vivos, gozamos de una segunda oportunidad para hacer que nuestras vidas sean bonitas, bonitas y bonitas. Aún en los momentos más difíciles: Podemos.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Traer de vez en cuando no sólo nuestras creaciones, sino también palabras que otros dejaron para nuestro presente y porvenir es una labor digna de encomio. En este caso has sido tú, Nelken, la que no has abierto las puertas de nuevo de Walt Whitman, el autor de aquellos versos ya puestos en la Blogsfera: Oh, capitán, mi capitán, homenaje a todos los bravos marinos que luchan contra la tempestad pero también, de modo simbólico, homenaje al Hombre que supera las dificultades. Whitman está considerado el padre de la Poesía norteamericana, pues ocupó todo el siglo XIX, y eso, en un país tan joven, es casi toda su Historia. Pero también fue un notable ensayista y periodísta que alcanzó fama a lo largo de todo el continente norteamericano y ,luego, en todo el mundo. Bonita entrada, porque es un mensaje de optimismo y ánimo, en la linea un poco del poema "If", de Rudyard Kipling, pero menos individualista.

Port

Valeriano Franco dijo...

Pues claro que podemos. No faltaba más. Y el día que digamos -y nos lo creamos- que no podemos estaremos acabados para siempre. Y aunque los trallazos del pasado te hayan dejado cicatrices que aun siguen doliendo cada mañana al levantarse o por la noche al dejar sobre la mesilla el último libro que estás leyendo, sólo pensar que por la mañana veras un nuevo amanecer o que por la tarde habrá un nuevo sol que se oculta tras el horizonte o que tienes a tu lado una mano caliente o que puedes ver la nieve que cubre la montaña, como la estoy viendo en estos momentos. No puedes decir más que PUEDO, PODEMOS, sea lo que sea PUEDO, PODEMOS . Pero también PODEMOS comprometernos. Y no sólo con nosotros mismo o con nuestro entorno próximo. ¿Y los otros que necesitas poder y no pueden? ¿Qué PUEDEN hacer hoy los “ viven” en Haití?
Gracias,amiga, por hacer que tu poema me haga reflexionar sobre esto.
Un abrazo

Nelken Rot dijo...

Gracias por comunicar vuestras interpretaciones, que son un estímulo para seguir aprendiendo y escribiendo.

En línea con la reflexión de Valeriano incluyo el vídeo de María Bethania que canta a la vida pese a que seguimos errando y aprendiendo. Los Brasileros festejan pero también son solidarios: varias brigadas del MST (Movimieno de los Sin Tierra) ya están en Haití prestando ayuda.

Alejandro dijo...

Nel, poco más puedo añadir a lo que ya te han dicho esos dos monstruos (guapos ¡eh!) del mundo de la poesía de hoy y de todos los tiempos. Sólo quiero confirmar que, efectivamente, todos podemos. Juntos llegaremos más lejos y seremos más, en cantidad, claro que sí, pero sobre todo en calidad. Y hablando de calidad no podemos mirar hoy a otro lado que no sea Haití. Si prescindiéramos de algo bueno de lo mucho que tenemos, las penas de quienes sufren serían menores y algunos, quizá, tendrían esa segunda oportunidad para seguir viviendo y compartiendo. Qué fácil es todo y, sin embargo, cuánto nos cuesta hacer la tarea.

Nosotros seguiremos intentando navegar juntos, como ayer, aunque alguna vez tengamos que remar en aguas turbulentas. Las de anoche fueron quietas, placenteras. Gracias por estar, y por actuar casi de anfitriona.

Besos

Alex

Anónimo dijo...

Muchas gracias a todos por seguir a una desorientada espacial como yo, jeje. Fue un placer compartir ese sitio con vosotros, que para mí era una mera intuición, suerte que esa brújula me funciona mejor que la espacial.
Levantar la vida no es fácil, pero es el único camino y cuando se hace cruzando miradas se tiene más fuerza.
Nelken